1 de junio de 2010
Recuerdo la charla que tuvimos un domingo por la tarde, en la que tú me dijiste:”Yo sé, que de acá a un mes voy a querer cortarme las venas.” Y ahora que lo pienso, ojala no sea así… Ya que no habría nadie para cerrar la herida y parar el sangrado, tal como me paso a mí, tuve que aprender a cerrar mis heridas sola y seguir adelante sin ti, y eso es lo único que m hace saber que cada día en el que pasa sin estar a tu lado soy más fuerte y feliz.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario